Una reciente encuesta del Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo ha revelado que la mayoría de los consumidores de noticias en Estados Unidos y el Reino Unido se sienten incómodos con el periodismo producido principalmente por inteligencia artificial (IA). Y no es para menos, ya que solo un 23% de los encuestados en Estados Unidos y un escaso 10% en el Reino Unido se sienten cómodos con las noticias generadas por IA.
¿Y qué temas son los que más preocupan? Política y crimen encabezan la lista de los tópicos sensibles donde los consumidores prefieren que haya una mano humana detrás de la redacción. La idea de que una máquina pueda interpretar y narrar eventos tan delicados parece generar más dudas que certezas.
Desconfianza en el uso de la inteligencia artificial en el ámbito del periodismo.
Más de la mitad de los encuestados en Estados Unidos y un 63% en el Reino Unido manifestaron su incomodidad con las noticias lideradas por IA. Es decir, hay un gran segmento de la población que todavía no confía en que las máquinas puedan reemplazar a los periodistas humanos en la cobertura de noticias importantes.
Este es solo el comienzo de una tendencia que ya se ve reflejada en las decisiones de muchas redacciones alrededor del mundo. Mientras algunos medios experimentan con herramientas de IA para tareas como la investigación y la transcripción de entrevistas, otros se encuentran en medio de intensos debates sobre hasta dónde debería llegar la automatización en el periodismo.
Preferencias y preocupaciones de los consumidores
La encuesta revela que los consumidores están más abiertos a que la IA se utilice en tareas menos visibles y que puedan mejorar su experiencia con las noticias, como la generación de contenido textual, ilustraciones y gráficos estilizados. Sin embargo, cuando se trata de la creación de fotografías y videos realistas, el rechazo es contundente. ¿Por qué esta diferencia?
Los encuestados consideran que los errores en contenidos visuales pueden tener consecuencias más graves. Una imagen o video falsos podrían engañar fácilmente a la audiencia, generando desinformación y perdiendo la confianza del público. Además, el estudio indica que los consumidores creen firmemente que debe haber siempre una intervención humana en el proceso de creación de noticias, especialmente en los temas más importantes y sensibles.
El uso de la IA en las redacciones ha comenzado a expandirse en medio de caídas de ingresos y recortes de empleo. Por ejemplo, News Corp Australia produce aproximadamente 3.000 artículos a la semana utilizando IA, y el tabloide alemán Bild ha advertido a su personal sobre futuros recortes debido a «las oportunidades de la inteligencia artificial». A pesar de estos avances, la aceptación pública sigue siendo un desafío.
El Instituto Reuters destaca que las audiencias están más dispuestas a aceptar la IA cuando esta trabaja en segundo plano, ayudando a personalizar y hacer más accesible la información. Pero cuando se trata de contenido público y temas delicados, la mayoría prefiere que los periodistas humanos tengan la última palabra.